jueves, 11 de octubre de 2018

"Tigres de cristal", de Toni Hill



Sinopsis:

A finales de los setenta, Víctor Yagüe y Juanpe Zamora fueron algo más que simples compañeros de clase. Su amistad, llena de confidencias y juegos, de alegrías y miedos, rebasó las paredes del aula y se extendió por las conflictivas calles de la Ciudad Satélite. Hasta el 15 de diciembre de 1978. Hasta el día en que un suceso trágico sacudió la conciencia de los vecinos. Hasta el momento en que los chicos se vieron obligados a escoger entre la lealtad y la salvación.

Treinta y siete años después, ambos vuelven a encontrarse en ese mismo escenario. Sus vidas han corrido suertes opuestas. Juanpe es un hombre a la deriva, sin futuro y con un presente turbio; Víctor, en cambio, puede considerarse un triunfador. Quizá por eso se siente extrañamente en deuda con su viejo amigo y decide enfrentarse a los claroscuros de un caso cerrado que, sin embargo, sigue envuelto de inquietantes preguntas que nadie quiere responder.

Pero lo que Víctor y Juanpe ignoran es que alguien, en la sombra, está escribiendo la historia de ese crimen. Un relato revelador que, tal vez, ninguno de los dos debería leer.



Extraordinaria. Me ha encantado la nueva novela de Toni Hill, un autor que me enganchó con su trilogía de Héctor Salgado, me siguió gustando con el suspense, terror y crímenes de "Los ángeles de hielo" y ahora me ha dejado pegada al libro sin poder parar de leer esta combinación de personajes, pasado y presente que confluyen en un final impactante con sorpresa incluida.


La culpa, el perdón, la amistad, el acoso escolar, los principios... todo esto y mucho más se recoge en esta historia de historias donde no hay blancos y negros, porque todo es de color gris, a veces muy oscuro. 

También he sufrido mucho leyendo porque todo el planteamiento es muy realista y cercano y hay situaciones, pasadas y presentes, muy injustas para algunos personajes, tremendamente injustas, y esas injusticias me resultan más dolorosas que un asesinato; me digo que es absurdo, porque ¿qué mayor injusticia para una persona que privarle de la vida? Pues a mí normalmente los asesinatos en las novelas me dejan más o menos fría, los veo más bien como el punto de partida de un misterio que resolver y aunque los entienda como algo malo, muy malo, no me hacen implicarme especialmente con el muerto; pero las historias en las que algunos personajes son acosados y manipulados de forma premeditada y cruel y son juzgados por otros equivocadamente con consecuencias tremendas para su vida me hacen sentir una tensión y una angustia casi insoportable. Menos mal que el autor me ha dado algún respiro al final, aunque no creáis que es un final de color de rosa precisamente.

Toni Hill va combinando capítulos centrados cada uno en distintos personajes que se van relacionando entre sí mostrándonos diferentes perspectivas y fragmentos de una historia que tiene sus orígenes en la muerte de un chaval en los años 70 a manos de dos de sus compañeros y se cierra en 2016 con el reencuentro de aquellos dos chavales y su relación con quienes ahora viven en el barrio en el aquella desgracia ocurrió. La situación que llevó a la muerte de Joaquín Vázquez, los destinos tan diferentes de Juanpe y Víctor, la suerte que corrieron sus familias, la vida de los chavales que ahora van al instituto al que ellos asistían entonces, las nuevas situaciones de acoso que allí se sufren y cómo la vida de unos y otros se va ligando hasta confluir en un final definitivo para algunos y abierto para otros. El autor no cierra ese final, aunque insinúa muy bien qué posibilidades pueden surgir para los personajes y me parece que lo ha conseguido de forma magistral y muy convincente.

Muy recomendable. Mi puntuación: 5

"Donde fuimos invencibles", de María Oruña

Ediciones Destino
María Oruña
Serie Valentina Redondo #3



Sinopsis:

El verano está terminando y la teniente Valentina Redondo está contando los días para empezar sus vacaciones. Pero algo insólito sucede en el centro mismo del pueblo costero de Suances: el jardinero del antiguo Palacio del Amo ha aparecido muerto en el césped de esa enigmática propiedad.

El palacio es una de las casonas con más historia de los alrededores, y después de permanecer mucho tiempo deshabitada, el escritor americano Carlos Green, heredero de la propiedad, ha decidido instalarse temporalmente en el lugar donde vivió sus mejores veranos de juventud. Pero la paz que buscaba se verá truncada por el terrible suceso, y aunque todo apunta a una muerte por causas naturales, parece que alguien ha tocado el cadáver, y Carlos confiesa que en los últimos días ha percibido presencias inexplicables.

A pesar de que Valentina es absolutamente escéptica en torno a lo paranormal, tanto ella como su equipo, e incluso su pareja, Oliver, se verán envueltos en una sucesión de hechos insólitos que les llevarán a investigar lo sucedido de la forma más extravagante y anómala, descubriendo que algunos lugares guardan un sorprendente aliento atemporal y secreto y que todos los personajes tienen algo que contar y ocultar. 



Una de las cosas que gusta de María Oruña es cómo va variando el tema central de sus novela manteniendo siempre como eje central una investigación criminal. Si en su primera novela de la serie Valentina Redondo se centró en la Guerra Civil española y la posguerra y en la segunda nos introdujo en el mundo de la espeleología y la ambición por el saber hasta un punto obsesivo, ahora nos lleva a visitar casas encantadas y nos presenta a personajes incrédulos que viven experiencias que no saben explicar y a otros convencidos de que lo paranormal existe decididos a investigar esos fenómenos en profundidad; con ellos conoceremos un mundo fascinante y viajaremos también un poco a un pasado glamuroso de actrices de cine y ricos indianos.

La investigación y la vida de los protagonistas están todavía más unidos si cabe que en  libros anteriores dada la relación que se establece entre Valentina, Oliver y Carlos Green, el dueño de la propiedad encantada. Valentina sigue tan escéptica y realista como siempre y Oliver, no exactamente crédulo, pero sí más abierto que su novia, tan amante del control, a posibilidades desconocidas y en esta historia, como en otras, tendrá también su papel en el desenlace final.

Como siempre, la música, las descripciones de paisajes y lugares, la caracterización de los personajes y la ambientación, impecables. María Oruña es una maestra en eso.

Todo está muy bien hilado en este libro que me ha resultado incluso más entretenido que los anteriores y me ha hecho desear seguir leyendo los libros de María Oruña, que se ha convertido en una de mis escritoras favoritas. Creo que para continuar participando de las aventuras de Valentina y Oliver tendré que esperar un poquito porque el próximo proyecto de la autora me temo que no los incluye, pero todo llegará, estoy segura.

Mi puntuación es un 4; no le doy un 5 porque no me atrapó hasta el punto de no poder parar de leer, pero lo he leído en un suspiro. Os lo recomiendo mucho.

sábado, 6 de octubre de 2018

"Un lugar a donde ir", de María Oruña

Ediciones Destino
María Oruña
Serie Valentina Redondo #2



Sinopsis:

Han transcurrido varios meses desde que Suances, un pequeño pueblo de la costa cántabra, fuese testigo de varios asesinatos que sacudieron a sus habitantes. Sin embargo, cuando ya todo parecía haber vuelto a la normalidad, aparece el cadáver de una joven en La Mota de Trespalacios, un recóndito lugar donde se encuentran las ruinas de una inusual construcción medieval. Lo más sorprendente del asunto no es que la joven vaya ataviada como una exquisita princesa del medievo, sino el objeto que porta entre sus manos y el extraordinario resultado forense de la autopsia. 

Cuando hasta los más escépticos comienzan a plantearse un imposible viaje en el tiempo, comienzan a ocurrir más asesinatos en la zona que parecen estar indisolublemente unidos a la muerte de la misteriosa dama medieval. 

Mientras Valentina Redondo y su equipo investigan los hechos a contrarreloj, Oliver Gordon, ayudado por su viejo amigo de la infancia, el músico Michael Blake, buscará sin descanso el paradero de su hermano Guillermo, desaparecido desde hace ya dos años, y descubrirá que la verdad se dibuja con contornos punzantes e inesperados.



Valentina Redondo y su equipo siguen investigando crímenes en los increíbles paisajes de Cantabria. Si conocéis la zona seguro que os es fácil imaginaros allí mismo al ir leyendo la descripción de lugares por los que se desarrolla la trama; si no, puede ayudaros internet en general y la web de la autora en particular, ya que en la página dedicada a esta novela recoge fotos de los lugares que se mencionan, y un enlace a la banda sonora del libro en spotify.

Muy entretenida y bien escrita esta nueva historia de misterio, con unos personajes creo que más cercanos que en la entrega anterior, aunque ayuda que ya nos conocíamos, claro. La relación de Oliver y Valentina continúa y nuestra guardia civil muestra su lado más humano con unos ramalazos de celos que reconoce absurdos pero no puede evitar. Pero no os preocupéis, la autora no nos mete en ningún folletín pseudoromántico, simplemente se aporta la dosis justa de escenas de pareja para acercarnos a la faceta más personal de los protagonistas, que por otra parte siguen investigando, Valentina los crímenes que se van sucediendo y Oliver el paradero de su hermano. Y, bueno, algo de romanticismo sí que hay, lo que a mí me encanta porque, como ya he comentado alguna vez, los policías intensos y sufridores me hartan un poco y da gusto ver a gente más bien corriente que tiene o ha tenido problemas pero que también disfruta de la vida, de los amigos y del amor.

La autora va combinando el relato de los hechos actuales con algún capítulo en el que entramos en los pensamientos del asesino y con otros que nos van llevando al pasado de un grupo de amigos cuya relación con los asesinatos iremos descubriendo poco a poco. Es una estructura que aporta diversos puntos de vista y va recomponiendo poco a poco un puzle que incluye sorpresa final cuando ya creíamos tener todas las piezas.

Por poner alguna pega, diría que alguna explicación de los actos del asesino me ha parecido un poco forzada, pero me lo he pasado tan bien con el conjunto que lo perdono.

Puntuación: 4